-Yo....este...Mercy...perdón, perdón, perdón –Deri se alejó
de mí, totalmente avergonzado, y también preocupado. –Soy un tarado, no debí
hacer eso.
-Tranquilo -le sonreí, tratando de que así se calmara. –No
te pongas así.
-Pero....No sé, pegame si querés, soy un desubicado.
-¿Y si te digo que...me gustó?
Me miró con sus oscuros ojos, llenos de sorpresa. Pareció ponerse
mas nervioso.
-¿Qué...qué...? No entiendo nada.
Me reí apenas y me acerqué a el. Tomé su rostro con mis
manos y le di y un pequeño beso en los labios.
Cuando me separé de él, frunció apenas el ceño.
-Mercy vos....O sea....¿Estás interesada en mí?
-Sí, claro –dije con una amplia sonrisa, que él correspondió.
Debo decir que en ese momento me sentía muy bien, como hacía días no lo estaba.
Justo llegó el momento de bajar del ferry, así que él me tomó
de la mano, que yo apreté con mucha calidez. Caminamos así un rato, hasta que salimos
del puerto. Hicimos unas calles sin decir una palabra. Creo que no era necesario
decir nada. Repito, yo me sentía muy bien, increíblemente bien, y a él se le
notaba en la cara exactamente lo mismo.
Llegamos a una plaza y allí nos sentamos. Deri pasó su brazo
por uno de mis hombros y me acercó a él.
-¿Sabés Mercy? Yo creo que tenemos muchas cosas en común. Y
...no sé me gustaría ser “algo” tuyo, pero también creo que tenemos poco tiempo
conociéndonos, y encima siempre encerrados en la universidad. Estaría bueno
seguir conociéndonos pero ya así, saliendo juntos. Con esto te quiero decir que
no te quiero presionar para que seas mi novia.
Oh. Genial. ¿Cómo responder a eso? No tenía ni la mas pálida
idea. Si lo pensaba, todavía lloraba por Richard, y ahora tenía la posibilidad
con otro chico, posibilidad que se había concretado. Pero...él no quería presionarme
para que sea su novia. Entonces, ¿qué hacer? ¿Saltar y gritar “¡Quiero ser tu
novia YA!” o aceptar lo que él decía?
-Ah, está bien. –respuesta imaginativa si la hay....
Sonrió, podríamos decir que...¿satisfecho? No sé, el tema es
que no habló mas de eso. Por lo menos por unos minutos.
-Ayer estuvo todo el día tirado en la cama, pensando si te
invitaba o no a salir. Tenía miedo de que rechazaras mi propuesta como la otra
vez. Al final me decidí porque me dije: “Deri, si no la llamás hoy, te la va a
llevar otro”. Y si pasaba eso no me lo iba a perdonar nunca.
Me reí de lo que contaba, pero también me dio mucha ternura,
por lo tanto se ganó un leve pellizco en la mejilla que lo hizo estallar en
risas. Después se quedó callado, serio.
-Vuelvo a decirte, estaría bueno que nos conociéramos. Mas porque
yo tuve dos relaciones que empezaron impulsivamente y terminaron siendo un desastre.
No quiero que con vos pase lo mismo.
-Entiendo....-bien, el chico me estaba demostrando un grado
de madurez que me sorprendía. Eso era bueno, -¿Ya tuviste dos novias?
-Si....Una cuando tenía 15 años, era muy chico, y ella
también. Después ella terminó tomando pastillas y se volvió algo loca, creo que
era porque su padre siempre le pegaba....Una historia muy triste, tuve que
dejarla porque iba a terminar volviéndome loco yo también. Y la otra....la otra
era ocho años mayor que yo.
-¿¿¿Ocho años???
-Sí –empezó a reírse –De mas está decir que viví dominado
por ella, era un desastre. Al final parecía mi madre.
-Ya lo creo. Qué historias tenés.
-Con vos quiero que sea otra cosa....Me das paz.
Bueno, lo que quería era matarme de ternura. Encima me
acariciaba el pelo. Un amor....
-Debo decirte que no tengo una historia llena de paz. Mi
familia ha sido un despelote, y mas de una vez me consuelo tomando, y hasta me
he querido fugar de casa.
-Mercy, no....-dijo sorprendido, y también asustado –No hagas
eso, no tomes, te va a hacer mal....
-Lo sé, pero a veces fue como que no tuve alternativa....Qué
sé yo, encima me gusta. Vas a tener que ayudarme con eso.
-Claro que lo haré. Y a ver...contame cómo fueron tus otras
relaciones.
Tragué saliva. ¿Qué decirle? Bien, sólo la verdad y nada mas
que la verdad.
-Yo...yo nunca tuve novio.
Se separó un poco y me miró, clavándome su profunda mirada,
llena de asombro.
-¿Nunca?
-¿Cuenta como noviazgo algo que tuve a los 9 años?
-Ehh...no....-respondió riendo.
-Bueno, entonces ya te lo dije: Nunca.
-¿Sabés? Es raro, porque muchas chicas tienen novios o algo
parecido en el secundario.
-Mi secundario era de mujeres, fue mixto el último año,
cundo me mudé. Y en ese año tampoco tuve nada.
-Pensé que alguno de los chicos de la banda de tu amigo
había sido novio tuyo....no sé.
-¿Esos? Ni loca. –me reí, pero en realidad estaba
sintiéndome muy incómoda. No me gustaban esas preguntas y mas viniendo de
alguien...experimentado.
-Entonces, ¿nunca estuviste con un hombre?
-No....
-¿Nunca besaste a un hombre?
Otra vez tragué saliva. Claro que había besado a un hombre,
a Richard, pero nunca le hablaría de el. Y también me acordé de otra cosa: la
vez que John, en el tren, aquella noche que nos escapamos, me había dicho que
qué iba a hacer cuando alguien me besara y que podía practicar con él. Ante las
preguntas que Friederich me estaba haciendo, por mas loco que sonara, me
arrepentía de no haberle hecho caso a John. Me sentía una tonta, una monja al
lado de un tipo que digamos...ya sabía todo. Eso, también me daba miedo. Todo lo
que nunca me había importado de mí ahora me preocupaba.
Pareció leerme la mente, porque sonrió y acariciándome una
vez mas el cabello, me dijo:
-No te preocupes, yo te enseñaré a besar. Y no me importa
que nunca hayas tenido novio, al contrario. Significa que no andás con el
primero que se te cruza.
Asentí con la cabeza, ya mas tranquila. Tomé su mano, y él se
puso de pie, era hora de volver a casa, estaba anocheciendo.
Cuando llegué a casa, mi madre me estaba esperando con cara
de interrogatorio. Le dije que todo había ido bien, y que me había divertido
mucho, pero del, o los, besos, no le dije nada. Sus reacciones seguían dándome
miedo.
Me tiré en la cama, abrazada a un almohadón. Estaba
contenta, sí, pero....llena de temores. Sabía que tenía que poner toda mi
confianza en Deri, pero me costaba. Mas que nada temía darle ilusiones y
después no ser lo que él esperaba porque no podía sacarme de la cabeza a
Richard. Con fuerza, apreté los párpados: tenía que lograrlo, con la ayuda de
Deri, Richard tenía que desaparecer de mi vida. Convertirse en un capricho de
adolescencia.
Por demoras en los trámites, mi madre y Harry tenían que
quedarse por un mes, o más. Si lo pensaba, a veces me molestaba, y a veces no.
Creo que ya me producía indiferencia que estuvieran, porque yo seguía con mi
vida, bastante independiente. Mi trato con Harry seguía igual, y mi madre tenía
sus ataques de odio y rencor contra mí, seguidos de ataques de puro cariño y amor.
Mas o menos como siempre.
A partir de ese sábado, mi humor había cambiado. No estaba
tan huraña y llorona, sino mas bien alegre, y eso se me notaba.
-Vaya, vaya....¿qué anda pasando que hoy vendemos sonrisas?
-No vendo, regalo.
Cris rió por mi contestación. Pobre, después de la cara que llevaba todos los días al trabajo,
verme un poco mas entusiasta la llenaba de asombro. De un bolsillo de su
delantal sacó un sobre.
-Para que veas que no sos la única que anda contenta –me mostró
el remitente, era una carta de John.
-¿Te escribió? ¡AYYY! ¡Mostrame, mostrame!
-No esperes nada romántico, sólo son dibujos y me dice que
está bien y que extraña mucho.
-¿Lo ves? Eso es raro en él. Para mí que están re jodidos.
-A mí me da igual lo que puso, lo importante es que me
escribió. Y ahora contame qué te pasa a vos, que no puedo creer que estés con
buena cara.
-Deri, el chico de la uni –sentí como me sonrojaba y por eso
ella largó una carcajada, aparte de...pegarme con un trapo.
-Ay Wells, mirate jajajaja Parece que estás muy metida ¡tu
cara, tu cara! Jajaja ¿Son novios o qué?
-Aún no, digamos que nos estamos conociendo pero....¡me
encanta!
-Y a mí me encanta verte así, al fin una cara bonita, aparte
de la mía. Hoy aumentará la clientela.
-Ya te dije que esto no es un prostíbulo.
-Pero la idea no hay que descartarla, Wells....
Ese mismo lunes, me tocó clase. Podría haber ido con cara de
pena, porque ya estaba cursando otras materias y no veía ni a Tamar ni a Evelyn.
O sea, estaba completamente sola. Pero fui llena de entusiasmo, incluso llegué
temprano, eso es todo un logro. Cuando tocó el receso, busqué a Deri en su aula
y juntos fuimos al buffet a tomar té. Entramos tomados de la mano.
-¡Wells! Veo que como no pudiste tirarte a Starkey, ahora
estás con éste.
Me giré con lentitud, aunque ya sabía quién era la que
hablaba. Marcia, parada junto a una de las ventanas del buffet, comía un chupetín,
con su mejor cara de zorra.
Quise ignorarla, pero me molestaba como se había referido a
Deri.
-“Este” tiene nombre. Y dejame de joder Cleave, hacé algo mas
productivo, por favor.
-Vos también podrías hacer algo mas productivo que hacerte
la mosca muerta –dijo acercándose, y arrojando el chupetín a un tacho de basura.
-A ver Marcia, ¿puedo saber qué te hice para que siempre me molestes?
-Existir. Eso hiciste. ¿Nunca te lo había dicho? Qué raro...
-Mercy, vamos, no te preocupes por esta chica –Deri me tironeó
del brazo.
-Si, mejor andate con tu noviecito –dijo Marcia.
-Marcia, me das lástima. Me da pena que no tengas otra cosa
con qué entretenerte. Y también me da pena que seas tan puta.
Apretó los dientes. Creo que estaba a punto de saltarme
encima y agarrarme del cuello, pero se contuvo. Lo peor para ella creo que era
que todo el buffet escuchó lo que acababa de decirle.
-Me la pagás Wells. Ésta es otra para la lista que me tengo
que cobrar. Vas a ver lo que es amar a Dios en tierra de indios.
-¿Me estás amenazando? Te puedo denunciar.
-Estás hablando con una futura abogada, eso no me asusta. Acordate,
en ésta universidad no terminarás nada.
-¿Qué? ¿Tu papá es el rector?
-Ningún familiar mío tiene que ver con la universidad. Esto es
para que veas que no necesito la ayuda de ninguno de ellos para que desaparezcas
de acá.
Deri me tironeó una vez mas, con fuerza, y finalmente
obedecí. Salí, sin sacarle los ojos de encima a Marcia, y ella hacía lo mismo. Una
vez que estuvimos afuera, Deri me llevó hasta unos bancos bajo los árboles. Nos
sentamos allí y me abrazó.
-No te preocupes, no estoy mal –dije separándome –Ya sé que
está loca, lo que diga no me afecta. Tiene un rencor inmundo.
-¿Puedo hacerte una pregunta?
-Ya la hiciste, pero bueno –reí.
-¿Quién es Starkey?
Sentí esa pregunta como si me hubiera dado una patada en el
estómago. Traté de que eso no se reflejara en mi cara.
-Era...un compañero del colegio, que nunca le dio ni la hora
a Marcia. Y eso siempre le molestó.
-¿Pero tuvo algo que ver con vos?
-No, para nada, ¡qué va! Sólo charlábamos a veces, eso es
todo, éramos buenos compañeros –bien, mi respuesta estaba sonando exagerada,
cualquiera diría que estaba sobreactuando.
-Yo...¿lo conozco?
-Ehh...eh....creo que no....bueno sí, estaba en mi fiesta.
-¿Es uno un poco bajito, de ojos azules?
-Sí, es ese, ¿por qué no vamos al aula? La clase debe estar
por comenzar –me miró un poco desconcertado, pero me siguió. Estaba asegurado:
como actriz, me moriría de hambre. Era poco creíble.
La clase continuó sin sobresaltos, por lo menos Deri no me
volvió a preguntar nada, y tanpoco me volví a encontrar con Marcia. Aunque sí
me encontré con Tamar, a la salida. Gracias a ella, me enteré que media
universidad sabía “de lo mío” con Deri. Era increíble lo chismosos que podían
ser todos.
Llegué a casa, feliz. Aunque...debo reconocer que un poco
preocupada por lo que Marcia me había dicho. Esa chica empezaba a darme miedo y
sabía que lo que buscaba era eso. Trataría de no darle el gusto.
Sobre la mesa me esperaba un sobre para sacarme las
preocupaciones.
Remitente: John Lennon. Sin embargo, al abrirla me percaté que no sólo
la había escrito él.
“Fea:
Estamos en
plan ‘Ahorro de papel’, por lo tanto, decidimos escribirte todos en la misma
carta. Además, Stu y yo te adjuntamos unos dibujos (obviamente los míos son
mejores). Solamente te digo lo de siempre, que estamos bien, todo normal. Espero
que te estés cuidando, y que todos estén bien por allá. Mas vale que no hagas
nada que podría enojarme.
Saludos,
John.
P/D: Lo de tu madre y tu padrastro....puaj, me dio náuseas. Mi
sentido pésame Wells, seguro lo estás pasando terrible.
Wells:
Podés deducir
quién soy porque tengo la mejor letra. Sí, soy Paul, ¿quién otro? Te cuento que
acá en Hamburgo nos cambiamos los nombres, están re buenos pero no te los voy a
decir. ¿Por qué? Porque soy jodido, como vos conmigo. Ahora, fuera de bromas,
te digo que estamos bien, y decíselo a Abby, que creo que está preocupada. Quiero
suponer que no la preocupó cierta persona cuyo nombre empieza en “Mer” y
termina en “cy”. Bueno, eso, no la andes preocupando, y cuidala por mí.
Saludos para
todos,
Paul.
Hola linda:
Te mandé
un dibujo, está horrible porque lo hice a las apuradas, ya te daré algo mas
digno.
Espero
que estés bien, John me contó lo de tu padrastro y....ojalá lo vayas llevando
bien. Aunque no quieras creerlo, John te extraña. Bueno, en realidad, todos. Ya
van unos cuantos días que estamos acá y es imposible no extrañar a la gente que
uno quiere.
Nos vemos pronto,
Stu.
Hola bestia:
Ya
sabés quién soy, ¿no? Te digo que estos tipos lo único que hacen es tratarme
como nene, ya les voy a pegar. Ah, extraño darte clases, mas que nada porque no
tengo a quien gritarle ¡Bestiaaa! Si lo digo acá estos alemanes no me
entienden.
Bueno, es una suerte ser el último en escribirte esta carta, así nadie
lee lo que te escribiré ahora: necesito saber cómo está Juliet, si la viste con
algún chico.....Verás, no me animo a escribirle, ya sabés, soy un tonto. ¿Qué
me recomendás? ¿Lo hago o no? Espero tu respuesta, y escribime una carta solo
para mí, para que no se enteren.
Chau
bestia, que sigas bien.
George.
Cuando terminé de leer la “carta colectiva”, se me caían las
lágrimas, de risa y...de tristeza. A quién engañaba, yo también los extrañaba
mucho, casi todos los días los veía, y de pronto ya no, y no sabía cuándo
regresarían. Me preocupaba que me estuvieran mintiendo y también...¿qué tal si
ese lugar les gustaba y terminaran quedándose a vivir allí? Si eso pasaba, ya
no los vería mas, o muy pocas veces. Esa idea me asustaba, no quería perderlos.
Metí la carta y los dibujos (por cierto, ambos eran muy
lindos) dentro del sobre y corrí a mi habitación. Era hora de contestarles y de
contarles sorbre mi miedo. Pero había algo que tenía en claro: no le contaría
nada a John sobre Deri. Si le decía, era capaz de llegar a Liverpool nadando sólo
para golpearlo. Cuando volviera le contaría todo con calma.
**********
Hola!!!!!! Volví, vieron? Eso es porque el examen es el 26, entonces tengo tiempo y escribí. Perdonen que haya aprovechado ese tiempo para dejarles un capitulo tan...berreta. Está re trucho, prometo que los próximos van a salir mejores (creo) Bueno, yo avisé jaja
Aparte de que tenía tiempo en el estudio, quise publicar antes de mi cumple. Es el 17, empiecen a saludarme rai naw XD También subo hoy, mi idea era subir mañana pero justo mañana es San Valentín, y el capitulo no es muy romántico, no pegaba con la ocasión.
Amm....me olvidé lo que iba a decir, ah si! Juli! Qué hacés o hacías en Brasil? Fuiste al carnaval mais grande do mundo? Yo iba a ser pasista en una scola do samba, pero no me aceptaron (?)
Grace! Pasame los links de tus fics, que los quiero leer!
Bueno, creo que no tengo nada mas pa' decir mijas. Me voy llendo pa' mi rancho (?) Muchas gracias por leer y comentar.
P/D: Cada vez tengo menos imaginación para los titulos de los capitulos, no sé qué me pasa. Agradeceré que colaboren dándome títulos que se les ocurran, después veré si los puedo usar jajaa.
Chauuuu!!!!!!!!!!